fbpx

Cada 16 de mayo la Familia Orionita se hace mas grande

El 16 de mayo de 2004 Juan Pablo 2do anunció a toda la Iglesia, a todo el mundo, a los peregrinos que se habían reunido en la plaza San Pedro y los millones que seguían la transmisión por televisión, que Don Luis Orione, el “estratega de la caridad”, ya era santo.

88 Aniversario Cottolengo de Claypole 00

El 28 de abril de 1935- Don Luis Orione colocaba la Piedra Fundamental del Pequeño Cottolengo de Claypole “La caridad y sólo la caridad salvará al mundo”.

80 Barranqueras

La historia está marcada por la unión y la colaboración de dos grupos de familias con diferentes orígenes y creencias. Gracias a la generosidad de misioneros y extranjeros, en 1937 nació la parroquia Inmaculada Concepción, un lugar sagrado donde la presencia de Dios y María se siente en cada uno de nosotros.

voluntariando claypole 2023

 

El Voluntariando volvió en toda su plenitud este año. En Claypole y en Mariano Roque Alonso (Paraguay), los jóvenes se hicieron "changarines" de la caridad al servicio de sus hermanos.

Francisco y Don Orione un solo corazon

El 13 de marzo se cumplen diez años del Papado de Francisco. De sus gestos y palabras surge una pregunta: ¿es Francisco un Papa orionita?

Ver a Jesus en cada projimo 01

La Misión Juvenil de Verano de la comunidad de Mendoza compartió junto a las familias que los recibieron el mensaje de la Buena Noticia.

Ya esta online el primer catalogo

Es una iniciativa del Grupo de Estudios Orionitas (GEO). Reúne más de 20 títulos publicados en papel y soporte digital.

voluntariando paraguay 2023 06

Los testimonios de los voluntarios y voluntarias que participaron en Calypole y Paraguay.

 

Juan Marco Aguirre (Mendoza)

"Mi experiencia en el Voluntariando de Claypole 2023 fue muy hermosa y renovadora. Vivimos días intensos, pero volvía siempre contento, ya que el cansancio que sentía había dejado frutos. Igualmente, no hubo cansancio que nos detuviera: vivimos los días como si fuese siempre el primero. Hay tantas anécdotas, vivencias y momentos que se quedaron en mi corazón que es imposible contarlos en un solo mensaje. El Voluntariando es una experiencia que hay que vivir para saber lo que se siente. En mi caso, fue un gran acierto haber dicho que sí a esta oportunidad. Aprendí un montón y me llevo una gran familia orionita, la cual sé que me va a acompañar en lo que necesite. Estoy muy agradecido, feliz y con ganas de volver".

 

Eli Hernández (Equipo organizador)

"Hace años vengo compartiendo el servicio de acompañar a los jóvenes que vienen desde las distintas provincias donde Don Orione, con su "Ave María y adelante", resuena sin parar, junto a un equipo increíble de personas que predisponen todo de sí. Este año fue especial, un reencuentro luego de la pandemia, cargado del amor generoso que Dios tiene por cada uno. Se sintió más que nunca resonar el lema "Ver y sentir a Cristo en el hombre". Tuvimos un grupo maravilloso de personas compartiendo el mismo carisma, servicio, entrega, amor y el abrazo de Jesús.
Cómo decía Don Orione, y se los decía a los chicos: "Yo soy un joven como ustedes y cómo ustedes siento que la vida fluye en mi corazón". Que sigan sintiendo en sus vidas que darse por enteros a los demás vale la pena y que hacer el bien, no solo les hizo bien a ellos, sino a todo aquél que sintió su huella. ¡Ave María y adelante!

 

María Viviana Barrios Toledo (23 años / Parroquia Sagrada Familia, Mariano Roque Alonso)

"He conocido el Pequeño Cottolengo y a los chicos desde que era muy pequeña, compartiendo con ellos en los eventos que se organizaban, sirviendo los sábados con mis hermanas o acompañando a mis padres en las misas dominicales.

Pero... En esta Aventura del Voluntariando 2023 he sentido a Dios tocando mi alma y corazón a través de mis hermanos del Cotto. Allí sentí que Dios me ama y quiere que sirva a quienes me necesitan. Él se encuentra en cada sonrisa inocente de los chicos, quienes sin conocerte ya están abriendo las puertas de su hogar y corazón.

Es algo incomparable y de un valor incalculable, porque yo me sentí amada y sentí que debía de amar de la misma forma a ellos. Mi experiencia cercana en el día a día de ellos fue muy emocionante, son seres de luz que vienen de distintas realidades y que juntos formaron una enorme familia".

 

Cesar Gimenez (14 años / Parroquia Cristo Rey, Luque)

"Quiero compartir mi testimonio sobre Rosalino (es uno de los residentes del Pequeño Cottolengo) que para mí es una gran persona, de un corazón gigante y bueno como ninguno.

Con el grupo de voluntariado, un día salimos de misión por un asentamiento. Fue una experiencia para mí única. Llegamos a una casa, donde nos habían dicho que uno de los integrantes de la familia se intentó quitar la vida varias veces, y en el momento de la oración, Rosalino toma la posta y comenzó a decir palabras a la familia donde ‒creo yo‒ el Espíritu Santo se manifestó e iluminó sus palabras hermosas y alentadoras. Recordó que Dios nos dio la vida, que hay que disfrutar de las maravillas que nos regala y valorar cada momento de nuestra vida. Sinceramente tocó mi corazón, porque pensando en cada residente y, especialmente en él, me di cuenta lo importante que es ayudarlos y agradecer la vida de cada uno de ellos, a quienes considero unos ángeles en la tierra.

Me encantó la experiencia y me gustaría que se repita".

 

Karin Campuzano (19 años / Parroquia Sagrada Familia, Mariano Roque Alonso)

"Fue muy lindo poder vivir esta experiencia de servir y haber conocido a cada uno de los chicos del Pequeño Cottolengo. Poder jugar con ellos, pintar, cantar, bailar, fue una experiencia única sin duda. El amor que se siente es inexplicable; ellos sin conocerte te reciben con un amor inmenso.

Me gustó mucho poder haber vivido esto y espero poder seguir haciéndolo siempre y quisiera animar a los jóvenes a que no se pierdan esta oportunidad de poder servir y compartir con los chicos del Cottolengo porque es algo muy maravilloso".

 

Deissy María Bonastre Ramírez (20 años / Parroquia Virgen del Rosario - Mayor Martínez - Ñeembucú)

"Esos días en el Cottolengo fue como vivir un Jueves Santo, dispuestos a dejarnos lavar los pies y, sobre todo, a lavar los pies. Aunque al término de la experiencia tuve la sensación de que me lavaron más los pies de lo que yo los pude lavar.

Era imposible no apreciar que Jesús estaba vivo en todas y cada una de las personas que viven ahí, porque a pesar de sus limitaciones y dificultades, nos damos cuenta de que sus muchas capacidades, que sienten a Jesús y quieren vivir, con esperanza, alegría y fe. Verdaderamente están llenos de vida y fortaleza.

Estas personas saciadas de la gracia de Dios me recordaron que tengo que salir de mi mundo y que los otros puede que me necesiten. Vi en ellos su capacidad de ayudar al hermano, de estar pendientes de las necesidades del otro. Son unas grandísimas personas, más preocupados por los demás que por ellos mismos. Son el modelo de ser humano que debemos ser porque en ellos abunda el bien y la voluntad de Dios: amar.

Por último, estos maravillosos días me han hecho crecer en la fe. Vivir para servir es un camino distinto, para mí ayudar a los demás es una de las experiencias más gratificantes que se pueden vivir. Solo hay una manera de poder entender todo esto y es viviéndola. Te invito a que vayas al Pequeño Cottolengo Don Orione de Mariano Roque Alonso, y podrás experimentar que la fuerza del amor te llena de ganas de vivir”.

El primer Don Orione digital del mundo esta en Mar del Plata

La tecnología de impresión 3D permite crear cosas impensadas, desde una casa a una prótesis para el cuerpo humano. En ese universo digital, profesores y alumnos orionitas pusieron la estrella del Apóstol de la Caridad.

Vientos de cambio

La Comunidad de Villa Domínico concretó este año un conjunto de reformas edilicias en el Colegio San Vicente de Paúl y la Parroquia San Luis Orione.

TOP